El Banco Central de Nicaragua (BCN) ha anunciado que su Consejo Directivo ha decidido mantener la Tasa de Referencia Monetaria (TRM) en un 7.0 por ciento. Esta decisión es de gran relevancia, ya que la TRM sirve como un indicador fundamental para señalar el costo de las operaciones monetarias de liquidez a un día plazo en córdobas. Además de esta medida, el BCN también ha optado por mantener las tasas de las ventanillas de Reportos Monetarios y Depósitos Monetarios, ambas con un plazo de un día para operaciones monetarias en córdobas, en 8.25 por ciento y 5.75 por ciento, respectivamente.
Te recomendamos: Nicaragua felicita al hermano pueblo de Brasil por su 201 aniversario de independencia
La TRM, como parte integral de la política monetaria del BCN, se establece en función de la evolución de las tasas de interés internacionales y de las condiciones monetarias internas. Este enfoque se alinea con el objetivo principal del BCN, que es promover la estabilidad de la moneda nacional y garantizar un funcionamiento sin contratiempos de los pagos internos y externos. Asimismo, busca respaldar la administración de liquidez en el sistema financiero y mantener condiciones propicias para la intermediación financiera.
Para llegar a esta decisión, el Consejo Directivo del BCN ha tenido en cuenta varios factores tanto a nivel nacional como internacional. A nivel global, se observa que la inflación está mostrando señales de reducción, aunque aún se mantiene por encima de los rangos meta en algunas economías. Esto ha llevado a los bancos centrales de todo el mundo a adoptar una postura restrictiva de la política monetaria, aunque se percibe una moderación en los aumentos de tasas de interés de referencia.
Puedes leer: El nuevo programa País para Nicaragua comprendido entre 2024 y 2028 fue aprobado por las Naciones Unidas
En el ámbito doméstico, Nicaragua ha experimentado un crecimiento económico sostenido, impulsado principalmente por el sector de servicios y el aumento de las exportaciones. El crédito al sector privado también ha contribuido a este crecimiento, al igual que otros flujos externos. La estabilidad en el empleo formal y la baja tasa de desempleo son indicadores positivos de esta tendencia económica.
Por otro lado, la inflación interna se ha moderado, aunque persisten presiones en los precios de alimentos y servicios debido a factores externos que afectan los costos de producción. Se espera que la inflación continúe disminuyendo gradualmente, en línea con lo que se observa en la región y a nivel global. Además, la política de subsidios gubernamentales ha contribuido a mantener la estabilidad de precios, mientras que el BCN ha fortalecido sus reservas internacionales.