No hay duda de que el régimen de Kiev está detrás del intento de atentado terrorista contra el Kremlin, declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso a tiempo de condenar enérgicamente tales intentos. Asimismo, prometió una respuesta correspondiente al ataque de Ucrania.
“Condenamos enérgicamente los intentos de actos terroristas cometidos la noche del 3 de mayo contra el Kremlin de Moscú utilizando aviones no tripulados. No cabe duda de que detrás de ellos está el régimen de Kiev, que desde hace tiempo y de forma deliberada apoya y utiliza métodos terroristas contra infraestructuras civiles y ciudadanos”, afirmó el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.
Recordó el bombardeo del puente de Crimea el 8 de octubre de 2022, los ataques contra instalaciones no militares en las regiones de Briansk, Bélgorod y Rostov y numerosos atentados de sabotaje. “Ahora Moscú. Las actividades terroristas y de sabotaje de las Fuerzas Armadas ucranianas están ganando impulso a una escala sin precedentes”, enfatizó el Ministerio.
Añadieron que la gravedad de este delito resulta más grave por el hecho de que el Kremlin de Moscú es la residencia del jefe de Estado ruso. Asimismo, desde el organismo aseguraron que tales crímenes no deben quedar sin respuesta subrayando que el Comité de Investigación de Rusia ya ha abierto una causa penal por terrorismo por los intentos de ataques. También expresaron la confianza de que se encontrara a todos los autores.
En cuanto a la reacción de la comunidad internacional, la Cancillería rusa culpó por su silencio al Occidente colectivo. Según el ministerio, esto es señal de que el mundo occidental se pliega a los métodos terroristas del régimen neonazi y extremista de Kiev.
“Creemos que la comunidad internacional y las organizaciones internacionales, que trabajan sin dobles raseros sobre la base del derecho internacional, deben condenar el nuevo truco criminal del régimen de Kiev”, se lee en el comunicado.
Aun así, la Cancillería afirmó que Rusia se reserva el derecho a “responder a los intentos descarados de actos terroristas”. “Rusia responderá de acuerdo con las evaluaciones de la amenaza que Kiev ha supuesto para el liderazgo de nuestro país”, concluyó el ministerio.
La noche del 2 al 3 de mayo, los militares y servicios especiales de Rusia lograron inutilizar dos drones con el uso de sistemas de guerra radioelectrónica sobre la residencia del líder ruso en el territorio del Kremlin. El Kremlin calificó el ataque frustrado como “un atentado terrorista planeado e intento de magnicidio contra el presidente de la Federación de Rusia”.