La Vicepresidenta Compañera Rosario Murillo, se dirigió a las familias nicaragüenses tras finalizar el Acto Central del 44 aniversario de constitución de la Policía Nacional y destacó que el pueblo de Nicaragua es un pueblo digno, luchador y triunfante.
“En este día en el que coincidió el 50 aniversario del heroísmo Presidente Combatiente Salvador Allende, que junto a su pueblo fue sacrificado por los intereses corruptos de los imperios”, dijo la Vicepresidenta de Nicaragua.
Remarcó que “hoy celebrando a nuestra Policía Nacional, hemos recordado la lucha de esta Policía Sandinista, Policía Nacional contra los delincuentes y no hablo de delincuentes comunes, hablo de delincuentes políticos, vendepatrias, esos cobardes y traidores que han ofendido la dignidad del pueblo nicaragüense, pero que se han encontrado, precisamente porque somos dignos con esa infinita dignidad que ha hecho que ni pudieron, ni podrán”.
La Vicepresidenta de Nicaragua enfatizó que “aquí está este pueblo, aquí está esta Policía, este Ejército de Sandino, de Zeledón, somos un pueblo digno, luchador y triunfante”.
Recalcó que “celebramos la vida de todos los compañeros que se han dado por entero a nuestra Nicaragua, celebramos esa memoria viva y ese ejemplo vivo que está en todos nosotros y en particular en las familias a la que le mandamos inmensos abrazos y celebramos las esperanzas victoriosas que nos iluminan, porque aquí esas esperanzas victoriosas son el sol que no declinan, el sol que anuncia ya todas las grandes victorias, las que nos hacen crecer en confianza, crecer en militancia, crecer en lealtad, crecer en vocación de servicio a las familias nicaragüenses y cada uno de nosotros sus servidores como parte de esa heroica familia nicaragüense que nos admira todos los días con la capacidad de trascender, de caminar, de trabajar, de vencer”.
Además, dijo que “muchos recuerdos, mucha admiración en esos recuerdos, mucha determinación y convicción de que el porvenir nuestro que lo estamos construyendo que somos el pueblo bendecido, milagroso, portentoso de ese Dios de todas las victorias que nos guía, porque somos además un pueblo de fe y eso en primer lugar, un pueblo de valores, de familias, un pueblo comprometido porque somos cristianos con la justicia social, con la verdad verdadera, con la historia de dignidad nacional con la memoria de valentía, de heroísmo, de nobleza, un pueblo que ante la sordera de los imperios que no responden al llamado y a la justicia en el sentido del llamado reiterado la reparación por toda la destrucción y los sufrimientos, nos hemos venido en primer lugar restaurando nosotros mismos y caminando con la fuerza que nos da Dios para ir paso a paso recuperándonos como seres espirituales”.